Expiación y trabajadera
Nacer para existir y ser, para formar parte de un todo humano que al son de un mismo ritmo transforma el sentimiento en una forma de entender a Dios y su Madre. Costalero en la forma mas primitiva de su nacencia y alejado de la comparación fácil, entiéndase como un ser inherente de la personalidad de cada uno. Todo no es transmitir mas allá de los faldones, todo es llenarse de gratitud y de amor y en su contradicción, de dolor y sufrimiento. El paseo es largo y cuando toca a su final se hace corto, es un único suspiro, la expiración y la muerte, un bucle que no rebosa y que cuanto mas se tiene mas se quiere. Cada uno lo entiende como quiere y cerca del espíritu alentador que lleva entre sueños a compaginar la vida con lo espiritual, la trabajadera y lo que ésta implica mella la cerviz y marca con el paso del tiempo, es un aviso de lo que se es, de lo que se siente, dice porque se esta ahí y lo que hay dentro de cada uno. El deseo es mas fuerte que el cuerpo y cuanto mas grande es la herida mas acusadas son las ansias. Ser costalero es todo esto y mas, no es la devoción impuesta de niñez, esa solo es la excusa, la manera de entender una semana santa y una vida religiosa a través de la amistad y la fuerza, de la superación de cada uno y la confraternización de ese todo humano. Es otra forma de creencia, la que ya no es por necesidad, sino la que se busca de manera inconsciente para llenar el vacío que no se comprende y que alejado de la satisfacción aislada de otras acciones nos implica en una sensación de gracia difícilmente comparable.
Es fácil hablar de kilos, de capataces y pasos, pero es complicado explicar con exactitud que es ser costalero, porque se es costalero y por mucho que les pese a algunos no todo se reduce a un solo paso. Esto se siente y se lleva por bandera, es la expresión de la creencia en un magnificado caminar y en contra de la hipocresía generalizada de una iglesia que nos representa, los que así nos sentimos defendemos nuestro sacrificio en comunión con nuestra fe, así me siento yo costalero.
Eduardo Salamanca
P.D:Robado de Locos y Cofrades
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